Para esto, para lo otro y para todo lo demás.

“Hay gente para todo” así reza el dicho castellano y es una verdad más grande que un castillo. No importa para lo que sea, siempre hay un voluntario disponible y dispuesto. ¿Y a qué se debe eso de que hay gente para esto, para lo otro y para todo lo demás?

Aunque es difícil dar una respuesta contundente debido a que los seres humanos tenemos nuestras propias motivaciones y circunstancias, nos arriesgamos a decir que muchos andan por la vida en busca de soluciones fáciles y rápidas sin pensar mucho en las consecuencias. Millones viven con exceso y millones viven en miseria. El mundo se polariza entre estos dos lados extremos sin que podamos hacer nada para impedirlo.

Como parece que los seres humanos siempre estamos buscando algo más, siempre hay voluntarios para todo. Como lo muestra la historia, en esa polarización, la humanidad va degradándose cada vez más. Hoy hay más de esto, de lo otro y todo lo demás que nunca antes. Tomemos por ejemplo el terrorismo. En vez de abandonarlo como cosa horrenda del pasado, sigue estando presente con cada vez más desprecio a la vida humana. Hoy hay miles y miles de individuos, en su mayoría varones jovenes, listos a entregar sus vidas por cualquier ideal sádico, enfermizo y cruel . Entonces, desbocados y sin límites son capaces de cometer los crímenes más crueles que vemos o peor, que experimentamos con demasiada frecuencia. Gente vacía, violenta, ignorante, cruel y sin esperanza que desgraciadamente convive con nosotros… pero no son como nosotros. No duermen si no hacen el mal.

Es importante que se sepa que los reclutadores de terroristas y mercenarios pululan en las redes sociales, además de los consabidos estafadores que prometen riquezas tipo “express” y en la que tantos incautos se quedan enredados. Parece difícil entender que comeremos pan con el esfuerzo de nuestro trabajo. Cada vez parece que solo los estúpidos trabajamos y luchamos según las reglas morales.

A LA GENTE LE HACE FALTA UNA RAZÓN PARA VIVIR Y ESA RAZÓN NO TIENE NADA QUE VER CON EL DINERO

… buscamos más, pero en el proceso muchas veces alcanzamos menos…

Hay mucha gente capaz de esto y lo otro y de todo lo demás porque no conocen nada mejor. Como no saben el propósito de la vida se pierden en un laberinto de ideas falsas que al final les llevan a la frustración. Vacíos y sin razones para vivir, se lanzan a la satisfacción personal dedicando todas sus energías a complacerse y a satisfacer sus deseos. Llegan a ser perfectos idólatras de ellos mismos. Es triste ver a la humanidad en un callejón sin salida.

Para mal de males, la vida es breve. ¿Cuántos años vivimos? En muchas naciones la expectativa de vida es de 75 a 85 años haciendo un cálculo generoso. ¿Es mucho tiempo? No lo es. Una Ceiba puede vivir mil años. Una tortuga 300 años. Para el hombre la vida es corta querido lector… y precisamente por eso, hay que cuidarla y vivirla con calma disfrutándola sin excesos, con mucha gratitud y teniendo siempre mucho bueno que hacer.

La conducta sabia es el trabajo, la familia, y la búsqueda de lo espiritual. Sigue librándonos de dolor el trabajo, el respeto, la tolerancia y la moral. No nos equivoquemos ni busquemos atajos no nos irá bien. ¿Hay algún consejo en todo esto? Sí. Que no se nos incluya en la lista de los que desperdician su vida, de los que la acortan estando siempre dispuestos para esto, para lo otro y para todo lo demás.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *